PARA DISFRUTAR AL MOMENTO O PARA LLEVAR
En la misma visita, se pueden conseguir alimentos preparados para consumir al momento o para llevar. El tradicional pato laqueado a la pekinesa es una de los productos más populares, al igual que el delicioso cerdo asado de piel crocante. Si buscas algo más sencillo, puedes probar la variedad de dumplings o pasteles con relleno de cerdo, camarones o vegetales. O si te interesa la repostería asiática hay un abanico de opciones para escoger y degustar, entre ellas el famoso pastel de luna que tradicionalmente se prepara en la Fiesta de Medio Otoño, una de las celebraciones más importante de la cultura china.
ARTÍCULOS DE COLECCIÓN
Por otra parte, y ésta quizá sea una de las cosas más interesantes del lugar, puedes conseguir artículos de entretenimiento o de colección, “periquitos” para decorar y darle a tu espacio cierto toque oriental, o simplemente adquirir un objeto del que nunca sabrás su utilidad, a menos que logres descifrar lo que dice su envoltorio. La creatividad seguramente puede encontrar materia prima suficiente en este entretenido espacio. Allí casi todo está en chino, los carteles, los periódicos, los avisos; incluso, la mayoría de las personas que lo visitan probablemente hablen en uno de los tantos dialectos, así que si no te inspiran los contenidos seguramente te inspirarán las formas que allí se ven. Hay un puesto maravilloso que vende películas chinas, no tienen traducción, pero son un tesoro estético.
UNA ALTERNATIVA PARA LOS DOMINGOS
Casi todo lo que está dispuesto dentro del mercado salta a la vista de los visitantes, por lo que se crea un paisaje diverso y pintoresco donde se entremezclan personas y objetos de distintas formas, tamaños y colores. Si tienes ánimos de merodear en otra cultura e internacionalizar tu mañana de domingo, el mercado chino puede ser una interesante alternativa dentro de la ciudad de Caracas. Ubicado al final de la avenida principal de El Bosque, puedes acceder a él por vehículo a través de la avenida Libertador, o si vienes a pie desde la estación de metro de Chacaíto puedes subir unas cuantas cuadras (cruzando la Libertador) y llegas al lugar sin pérdida alguna.
Por Pablo Galindo | Fotos: Federico Parra
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