La lenteja mantiene el cuerpo sano
Hipócrates, médico del siglo V, la recomendaba a los enfermos hepáticos
 |
Según la manera de preparar las lentejas, pueden variar sus propiedades y nutrientes. CORTESÍA
Contenido relacionado
EDÉN VALERA | EL UNIVERSAL
sábado 17 de mayo de 2014 12:00 AM
ESPECIAL PARA EL UNIVERSAL
Originaria del Cercano Oriente u Asia Occidental, la lenteja (Lens culinaris de la familia Papilionácea) es una planta herbácea cuyo fruto es un alimento con una alta concentración de nutrientes, y una legumbre de las más antiguas que se conocen.
Los primeros indicios de su cultivo datan de 7.000 a 9.000 años de antigüedad en Israel. Egipto tuvo un cultivo intensivo y fue de sus primeros exportadores. Era la comida destinada a la realeza, como puede verse en una pintura de 1200 a. C., en la cual un sirviente está cocinando esta legumbre.
Pero también fue la comida de los obreros que construyeron la pirámide de Keops, ya que los griegos y los romanos la consideraban un alimento destinado únicamente a los pobres, y lo tenían como el plato principal de las cenas funerarias porque "tenía la virtud de alegrar a los deprimidos, llorosos y desesperados".
Hipócrates, médico del siglo V, a los enfermos de hígado les indicaba un caldo concentrado de lentejas; y la Biblia dice que por un plato de lentejas fue que Esaú, hijo de Rebeca e Isaac, vendió la primogenitura a su hermano Jacobo perdiendo así el sacerdocio, el patriarcado, y la doble porción de su herencia.
Al lente se le llama así porque tiene una curvatura similar a la de una lenteja.
Es una planta anual herbácea con tallos de 30 a 40 cm, endebles, ramosos y estriados, hojas oblongas, flores blancas con venas moradas, y fruto en vaina pequeña, con dos o tres semillas pardas en forma de disco de medio centímetro de diámetro, aproximadamente.
Al igual que otras leguminosas, la lenteja tiene en su raíz bacterias Rhizobium que son capaces de transformar el nitrógeno atmosférico, que las plantas no pueden utilizar, en nitrógeno orgánico (nitrato), que sí pueden utilizar, por eso es rica en proteínas, nutriente que contiene moléculas de nitrógeno en su composición.
Además contiene vitaminas K, C y B, calcio, selenio, hierro, magnesio, fósforo, potasio, sodio, zinc; tiene un alto contenido de fibra, e hidratos de carbono.
Actualmente los principales países productores son: Canadá, India, Turquía, Australia, los Estados Unidos de América, Nepal, China, Siria, Irán y Etiopía.
Otros usos
La lenteja se cultiva básicamente para ser consumida en forma de sopa, crema, ensalada, puré, y en otras preparaciones.
Por tener selenio es un alimento que protege a las células del organismo humano de la oxidación provocada por los radicales libres.
Su fibra soluble ayuda a eliminar el colesterol en la sangre; a ralentizar la fabricación hepática de colesterol; a aliviar el estreñimiento; y a reducir el riesgo y los síntomas de la diverticulosis.
Un estudio por la Escuela de la Salud Pública de Harvard, en Boston, demostró que las dietas en las que se consumen muchas lentejas, por sus altos niveles de isoflavonas, reducen el riesgo de desarrollar cáncer de mama. Su consumo regular reducen el riesgo de contraer una enfermedad cardíaca coronaria.
Debido a su alta cantidad de proteínas, es un alimento recomendado especialmente para el desarrollo muscular; para los niños, adolescentes y embarazadas. Por su alto contenido en hierro es recomendado para personas que practican deportes extremos.
Su riqueza en potasio ayuda a mejorar la circulación, se le recomienda a los hipertensos; y es buena para prevenir enfermedades reumáticas.
Por su contenido de fósforo ayuda a mantener huesos y dientes sanos; el PH natural de la piel; a una mayor resistencia física; y a mejorar las funciones biológicas del cerebro.
Su elevado contenido de vitamina K beneficia la coagulación de la sangre.
Las personas con cálculos renales deben limitar el consumo de lentejas.
eden.valera@gmail.com
Originaria del Cercano Oriente u Asia Occidental, la lenteja (Lens culinaris de la familia Papilionácea) es una planta herbácea cuyo fruto es un alimento con una alta concentración de nutrientes, y una legumbre de las más antiguas que se conocen.
Los primeros indicios de su cultivo datan de 7.000 a 9.000 años de antigüedad en Israel. Egipto tuvo un cultivo intensivo y fue de sus primeros exportadores. Era la comida destinada a la realeza, como puede verse en una pintura de 1200 a. C., en la cual un sirviente está cocinando esta legumbre.
Pero también fue la comida de los obreros que construyeron la pirámide de Keops, ya que los griegos y los romanos la consideraban un alimento destinado únicamente a los pobres, y lo tenían como el plato principal de las cenas funerarias porque "tenía la virtud de alegrar a los deprimidos, llorosos y desesperados".
Hipócrates, médico del siglo V, a los enfermos de hígado les indicaba un caldo concentrado de lentejas; y la Biblia dice que por un plato de lentejas fue que Esaú, hijo de Rebeca e Isaac, vendió la primogenitura a su hermano Jacobo perdiendo así el sacerdocio, el patriarcado, y la doble porción de su herencia.
Al lente se le llama así porque tiene una curvatura similar a la de una lenteja.
Es una planta anual herbácea con tallos de 30 a 40 cm, endebles, ramosos y estriados, hojas oblongas, flores blancas con venas moradas, y fruto en vaina pequeña, con dos o tres semillas pardas en forma de disco de medio centímetro de diámetro, aproximadamente.
Al igual que otras leguminosas, la lenteja tiene en su raíz bacterias Rhizobium que son capaces de transformar el nitrógeno atmosférico, que las plantas no pueden utilizar, en nitrógeno orgánico (nitrato), que sí pueden utilizar, por eso es rica en proteínas, nutriente que contiene moléculas de nitrógeno en su composición.
Además contiene vitaminas K, C y B, calcio, selenio, hierro, magnesio, fósforo, potasio, sodio, zinc; tiene un alto contenido de fibra, e hidratos de carbono.
Actualmente los principales países productores son: Canadá, India, Turquía, Australia, los Estados Unidos de América, Nepal, China, Siria, Irán y Etiopía.
Otros usos
La lenteja se cultiva básicamente para ser consumida en forma de sopa, crema, ensalada, puré, y en otras preparaciones.
Por tener selenio es un alimento que protege a las células del organismo humano de la oxidación provocada por los radicales libres.
Su fibra soluble ayuda a eliminar el colesterol en la sangre; a ralentizar la fabricación hepática de colesterol; a aliviar el estreñimiento; y a reducir el riesgo y los síntomas de la diverticulosis.
Un estudio por la Escuela de la Salud Pública de Harvard, en Boston, demostró que las dietas en las que se consumen muchas lentejas, por sus altos niveles de isoflavonas, reducen el riesgo de desarrollar cáncer de mama. Su consumo regular reducen el riesgo de contraer una enfermedad cardíaca coronaria.
Debido a su alta cantidad de proteínas, es un alimento recomendado especialmente para el desarrollo muscular; para los niños, adolescentes y embarazadas. Por su alto contenido en hierro es recomendado para personas que practican deportes extremos.
Su riqueza en potasio ayuda a mejorar la circulación, se le recomienda a los hipertensos; y es buena para prevenir enfermedades reumáticas.
Por su contenido de fósforo ayuda a mantener huesos y dientes sanos; el PH natural de la piel; a una mayor resistencia física; y a mejorar las funciones biológicas del cerebro.
Su elevado contenido de vitamina K beneficia la coagulación de la sangre.
Las personas con cálculos renales deben limitar el consumo de lentejas.
eden.valera@gmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario