Las Bejarano (clasificación B, mayores de 14 años)
El sainete “Las Bejarano”, escrito y dirigido por Wilfredo “Trankylyno”
Tortosa.Actor, dramaturgo, director, escenógrafo, iluminador,
disenador de vestuario y maquillaje...
La obra está inspirada en el cuento “No son blancas las Bejarano”, de
Antonio Arráiz. Narra la historia de tres bellas hermanas morenas,
Magdalena, Eduvigis y Belén Bejarano. Ellas fueron unas famosas cocineras
de dulces los cuales eran muy requeridos en la Caracas de la primera
década del siglo XIX. A la luz de las bujías perfumadas en las noches de
baile, eran motivo de diálogo y críticas. De sus habilidosas manos
salían las delicias de repostería que surtían buena parte de la demanda
de la ciudad. Eran maestras en esa artesanía culinaria. Las
diferentes clases sociales saborearon los productos que ellas elaboraban.
Y entre cotilleos, comentarios y chanzas, ellas nos relatan los
acontecimientos del 5 de julio de 1811, mientras elaboran la torta de
plátano que las hizo famosas.
El espectáculo muestra al trío de damiselas, finamente encarnadas por
actores, en labores de cocina y haciendo frente a la decisión del ya depuesto
régimen español de no permitirles usar el título de doñas, por no ser puras
de linaje, por no ser blancas. La naciente república venezolana les
permitiría eso y muchas cosas más, poco a poco, porque las discriminaciones
hispanas siguieron imperando algunos años. Se trata de un montaje divertido
y educativo.
Se estará presentando desde el 29 de agosto hasta el 8 de septiembre
de 2013, en la Sala de teatro 2 de la Fundación Celarg, en horario de
jueves a sábados a las 8:00 p.m. y domingos a las 7:00 p.m. Entrada
General Bs. 120, estudiantes y tercera edad Bs. 100 (clasificación
B, mayores de 14 años).
Antonio Arraiz
(Barquisimeto, 1903 - Connecticut, 1962)
Destacado poeta, periodista y novelista larense. Fueron sus padres Juan Arráiz y Concepción Mujica. Realizó estudios primarios en su ciudad natal (1909-1911), culminándolos en el Colegio Católico Alemán en Caracas (1911-1914). En cuanto a la educación secundaria, la misma la efectuó en los liceos Andrés Bello y Caracas. En 1919, con apenas 16 años de edad, se aventuró a viajar a los Estados Unidos, donde quería cumplir con sus 2 sueños: ser aviador y actor de cine. Una vez en suelo norteamericano, trabajó en diversos y veces ruidos oficios, hasta que regresó a Venezuela en 1922. De vuelta en el país, inició una intensa carrera deportiva que lo llevó a practicar disciplinas como el fútbol y la esgrima, esta última en compañía de Luis Enrique Mármol, quien lo puso en el camino de la poesía. Por estos días trabajó en una casa de comercio y en una empresa de cines como jefe de Propaganda. Aunque no era estudiante de la Universidad Central de Venezuela, participó en las protestas estudiantiles contra el régimen de Juan Vicente Gómez, en febrero de 1928 y formó parte en abril de ese año, en el asalto al cuartel San Carlos; por lo que cayó preso, fue torturado y encarcelado en La Rotunda, hasta el 1 de enero de 1935, cuando fue confinado a Barquisimeto donde trabajó en el periódico El Heraldo.Nuevamente apresado y desterrado, viajó por Ecuador y Colombia, regresando a Venezuela en abril de 1936, durante el gobierno de Eleazar López Contreras. A partir de este momento ejerció diversos cargos públicos y fue director de El Nacional (1943-1948). A raíz del derrocamiento del gobierno de Rómulo Gallegos (24 de noviembre de 1948), se exilió voluntariamente en Estados Unidos de manera permanente (enero de 1949), donde contrajo nupcias tras un divorcio y trabajó en el departamento de publicaciones de la Naciones Unidas. En el país del norte, se dedicó a escribir poemas, cuentos, novelas, textos pedagógicos. Asimismo, se convirtió en un importante defensor de la naturaleza, apasionándose también por la geografía y además, se adelantó en muchos de sus escritos a las luchas reivindicativas de la actualidad. El libro de poemas Áspero publicado en 1924, para muchos estudiosos de la literatura, rompió con el verso tradicional y la moral puritana venezolana.
- Categoría: Postres de la Revista "Cocina y Vino"
"Que se tenga a las Bejarano como blancas aunque sean negras"
dice el decreto del Rey Carlos IV, en la Real Cédula que las
Bejarano pudieron comparar en el año 1793, con el dinero que
les permitió ganar la venta de la torta Bejarana en Caracas.
Estas hermanas pardas, Magdalena, Eduvigis y Belén, se hicieron
famosas en la ciudad gracias a esta receta. Debido a que en
el siglo XVIII, en Venezuela no se sembraba trigo, e importarlo de
España era muy costoso, para la elaboración de la Bejarana se
utilizaba pan de horno molido mezclado con plátano maduro.
Hoy, esta torta, se considera parte de la repostería más tradicional
venezolana.
Ingredientes
7 plátanos maduros
50 g de margarina
2 huevos
2 cucharaditas de bicabornato
1 cucharadita de clavos molidos
1 cucharadita de canela
4 cucharadas de ajonjolí para decorar
300 g panela de papelón
1/4 taza de agua
6 bizcochos rallados
125 g de queso blanco rallado
6 roscas de pan de horno
Preparación
Precalientar el horno a 180 °C. Enmantequillar un molde para torta
y espolvorear con el ajonjolí.
Hervir el plátano hasta que quede como para hacer puré, pelar
y triturar. Luego, tostar el pan de horno y molerlo. Después,
preparar un melado con el papelón derretido en el agua. Retirar
del fuego y colar.
Colocar los plátanos, el melado, la canela, los clavos molidos,
el bicaborato, los huevo, en un bol y con la ayuda de una
batidora mezclar hasta que quede una mezcla homogénea.
Verter en el molde. Hornear por 45 minutos, aproximadamente.
Retire del horno y deje enfriar.
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