"Mis empanadas son famosas pero lo que mejor me queda es la torta de pan"
A las 6:00 am comienza a llegar la clientela al puesto de empanadas de Enérida Salcedo, en la calle Independencia, frente a la plaza de La Asunción, en Margarita.Allí trabaja la cocinera, de lunes a viernes, desde hace más 40 años
.Cada día vende más de 300 empanadas de masa fina y crujiente, con los agujeros necesarios para descubrir rápidamente en el recipiente en el que reposan después de salir del aceite hirviendo, cuál es de cazón "nunca de raya, que no quedan buenas" de mariscos, de queso, de carne, de pollo o de caraotas. Como acompañantes, café negro y papelón con limón.
Las empanadas de Salcedo están incluidas en la lista 101 Lugares y sabores imperdibles de Margarita. Pero la cocinera dice que mejor que sus empanadas son sus tortas y de ellas la de pan es la que mejor le queda. "Lleva pan remojado en leche, pasas, ron, queso blanco rallado, leche condensada, huevos y el caramelo que la cubre", explicó a la audiencia reunida en la escuela de cocina Instituto Culinario Turístico del Caribe, que dirige el chef Sumito Estévez, durante una de las tertulias celebradas en octubre pasado como parte del cronograma de actividades que ofreció la última edición de Margarita Gastronómica.
Antes de dedicarse a la venta de empanadas, Salcedo, que "no le come a joven porque no sabe", trabajó como asistente de los sacerdotes de la iglesia de La Asunción. "De todo lo que yo preparaba la torta de pan era lo que más les gustaba, sobre todo a monseñor Carlos Romero, a quien le encantaba su textura de quesillo".
.Cada día vende más de 300 empanadas de masa fina y crujiente, con los agujeros necesarios para descubrir rápidamente en el recipiente en el que reposan después de salir del aceite hirviendo, cuál es de cazón "nunca de raya, que no quedan buenas" de mariscos, de queso, de carne, de pollo o de caraotas. Como acompañantes, café negro y papelón con limón.
Las empanadas de Salcedo están incluidas en la lista 101 Lugares y sabores imperdibles de Margarita. Pero la cocinera dice que mejor que sus empanadas son sus tortas y de ellas la de pan es la que mejor le queda. "Lleva pan remojado en leche, pasas, ron, queso blanco rallado, leche condensada, huevos y el caramelo que la cubre", explicó a la audiencia reunida en la escuela de cocina Instituto Culinario Turístico del Caribe, que dirige el chef Sumito Estévez, durante una de las tertulias celebradas en octubre pasado como parte del cronograma de actividades que ofreció la última edición de Margarita Gastronómica.
Antes de dedicarse a la venta de empanadas, Salcedo, que "no le come a joven porque no sabe", trabajó como asistente de los sacerdotes de la iglesia de La Asunción. "De todo lo que yo preparaba la torta de pan era lo que más les gustaba, sobre todo a monseñor Carlos Romero, a quien le encantaba su textura de quesillo".
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