CARPE VINUM
"Beber estos vinos es sentir el latido de la mejor fruta, recordar que la belleza existe..."
VLADIMIR VILORIA | EL UNIVERSAL
sábado 22 de noviembre de 2014 12:00 AM
Pago de los Capellanes
Desde 1996, viñas y bodega en Pago de los Capellanes, encarnan el vino élite embotellado en la Ribera del Duero.
Musculoso y homogéneo, filoso, fresco y esencialmente carnoso y elegante, Crianza y Reserva, hoy por hoy, son capaces de relatar la historia de lo mejor del vino de esta galopante, luminosa y muy expresiva Denominación de Origen española.
Beber y disfrutar de estos vinos es acercarse a la certeza del vino de verdad, es sentir el latido de la mejor fruta, es recordar que la belleza existe.
"Pago de los Capellanes está dividido en 35 parcelas, cuyo fruto se elabora por separado. Durante los meses previos a la vendimia se realizan controles diarios de muestras en cada parcela, cogiendo uvas por la mañana y por la tarde, analizando la evolución de los racimos, prensando cien bayas de cada parcela y estudiando su maduración. No es hasta primeros de octubre, y cuando la uva está en su punto óptimo, cuando se empiezan a recoger los frutos de las viñas.
En ese período, el día ofrece unos 25ºC de media. La noche, 5ºC. Este contraste de temperaturas favorece la maduración de los racimos, potencia su grado alcohólico, el color y los taninos, además de ayuda a mantener una acidez muy equilibrada.
El proceso de crianza se lleva a cabo en una bodega subterránea con un calado de diez metros de profundidad. Aquí reposan nuestros vinos en barricas de roble francés nuevo (de uno a tres años) hasta que alcanzan la madurez óptima para su mezcla o coupage. Una selección de 22 tipos de roble francés según su origen (Alier, Nevers, Centro) secado al aire libre (de 24 a 60 meses) y tostado ayudan a envejecer el vino". Como se ve, aquí hay vino de alta factura.
Pago de los Capellanes Crianza, ciento por ciento Tinto Fino (Tempranillo), expresa la franqueza de un rojo poderoso pero elegante y de un logrado equilibrio. Concentrado y firme, goloso y persistente, su fruta es nítida y la uva estalla jugosa y fresca. Listo para disfrutar desde ya, igual la botella lo pulirá para mejor.
Por su parte el Reserva, igualmente Tinto Fino, gana en fineza y persistencia, aunque no deja muy atrás a su hermano menor el Crianza.
Fino en boca, su equilibrio de fruta, tanino y acidez sobresale en gran elegancia y tersura. Delicado, su persistencia es sobresaliente.
Rutilantes etiquetas de la excelente cosecha 2010 -añada, si se quiere, histórica-, aquí puede leerse hasta dónde ha llegado la Ribera del Duero, excelencia y prestigio posible hoy en Venezuela gracias a las bien provistas bodegas de Casa Oliveira.
vladimirviloria@gmail.com
Chile a su mesa,
Se produce con el método espumante gasificado bajo estrictos controles de calidad, con vinos de uvas cosechadas en el Municipio Moján del Zulia
Desde 1996, viñas y bodega en Pago de los Capellanes, encarnan el vino élite embotellado en la Ribera del Duero.
Musculoso y homogéneo, filoso, fresco y esencialmente carnoso y elegante, Crianza y Reserva, hoy por hoy, son capaces de relatar la historia de lo mejor del vino de esta galopante, luminosa y muy expresiva Denominación de Origen española.
Beber y disfrutar de estos vinos es acercarse a la certeza del vino de verdad, es sentir el latido de la mejor fruta, es recordar que la belleza existe.
"Pago de los Capellanes está dividido en 35 parcelas, cuyo fruto se elabora por separado. Durante los meses previos a la vendimia se realizan controles diarios de muestras en cada parcela, cogiendo uvas por la mañana y por la tarde, analizando la evolución de los racimos, prensando cien bayas de cada parcela y estudiando su maduración. No es hasta primeros de octubre, y cuando la uva está en su punto óptimo, cuando se empiezan a recoger los frutos de las viñas.
En ese período, el día ofrece unos 25ºC de media. La noche, 5ºC. Este contraste de temperaturas favorece la maduración de los racimos, potencia su grado alcohólico, el color y los taninos, además de ayuda a mantener una acidez muy equilibrada.
El proceso de crianza se lleva a cabo en una bodega subterránea con un calado de diez metros de profundidad. Aquí reposan nuestros vinos en barricas de roble francés nuevo (de uno a tres años) hasta que alcanzan la madurez óptima para su mezcla o coupage. Una selección de 22 tipos de roble francés según su origen (Alier, Nevers, Centro) secado al aire libre (de 24 a 60 meses) y tostado ayudan a envejecer el vino". Como se ve, aquí hay vino de alta factura.
Pago de los Capellanes Crianza, ciento por ciento Tinto Fino (Tempranillo), expresa la franqueza de un rojo poderoso pero elegante y de un logrado equilibrio. Concentrado y firme, goloso y persistente, su fruta es nítida y la uva estalla jugosa y fresca. Listo para disfrutar desde ya, igual la botella lo pulirá para mejor.
Por su parte el Reserva, igualmente Tinto Fino, gana en fineza y persistencia, aunque no deja muy atrás a su hermano menor el Crianza.
Fino en boca, su equilibrio de fruta, tanino y acidez sobresale en gran elegancia y tersura. Delicado, su persistencia es sobresaliente.
Rutilantes etiquetas de la excelente cosecha 2010 -añada, si se quiere, histórica-, aquí puede leerse hasta dónde ha llegado la Ribera del Duero, excelencia y prestigio posible hoy en Venezuela gracias a las bien provistas bodegas de Casa Oliveira.
vladimirviloria@gmail.com
Sabores y Cavas del Sur:
Chile a su mesa,
oferta agroalimentaria
y enogastronómica
Fecha: Jueves 20 de noviembre de 2014 a las 6:30 pm
Lugar: Salón Cassandra, Mezzanina, del Eurobuilding Hotel & Suites,
Urb. Chuao, Caracas.
Hecho por Celiveca
Hecho por Celiveca
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