La lonchera según los chefs
Tres cocineros de Maracaibo proponen -desde su gusto y sazón- una merienda para sus hijos. Todos coinciden en la importancia de incorporar, de lunes a viernes, frutas en las viandas.
por HÉCTOR GALBÁN | imagen: NORGE BOSCÁN | DOMINGO 13 DE SEPTIEMBRE DE 2015
Por Tomás Rodríguez Ball
Después de dos hijos ya Tomás Rodríguez es todo un experto haciendo loncheras. "Siempre me ha gustado cocinar, y desde que mis dos hijos eran pequeños, cuando preparaba cosas en casa, les daba pedacitos de verduras y frutas para que se fueran familiarizando. Ya ambos son universitarios y, la verdad, no sufrí mucho con el tema de las loncheras".
El chef de Lola Mora recuerda que les preparaba cereal, leche y frutas. "Como lonchera para la universidad les enviaría un sándwich de roast beef con una ración de fruta". Resalta que en las loncheras de los chamos debe incluirse siempre una ración de fruta fresca para aportar una buena carga de nutrientes.
"Hacer la lonchera para el chamo es un proceso de descubrimiento tanto para los padres como para los hijos. A los primerizos les digo que tengan paciencia y que vayan haciendo pruebas de ensayo y error hasta lograr encontrar la combinación que al niño le guste. Partiendo de ese plato que le gusta, les recomiendo ir haciendo ligeras variaciones para que no se aburran siempre con lo mismo".
Por Josely González
Ya su hija no está en primaria pero aún le hace merienda y ella no se pone brava; por el contrario, le encantan las meriendas que su mamá le hace. "Desde pequeña la he acostumbrado a llevar merienda. Trato de que no coma tantas frituras que venden en las cantinas de los colegios, busco que se alimente sano".
Josely es comunicadora social y luego de varios años de ejercicio decidió estudiar cocina. Poco a poco la gastronomía se convirtió en su primer trabajo al punto de dejar de ejercer como publicista. Solo tiene tres años en las cocinas profesionales pero declara estar completamente enamorada de su oficio tras los fogones.
"Nunca tuve mayores problemas con las meriendas porque mi hija Majo siempre fue de buen comer. Es fanática del pan pita y le hago de merienda los 'sobres majo': uso el pan pita como base y le coloco el relleno en el centro. Luego los envuelvo como sobres y los barnizo con aceite de oliva, agrego un punto de sal y los llevo al horno.
Por lo general se los hago de pizza porque es su otro delirio". Confiesa que nunca le gustó madrugar para hacer loncheras y que estos "sobres", además de gustarles a su hija, puede hacerlos en la noche y en la mañana. Sólo es cosa de meterlos al horno.
Por León Faría
Solo tiene cuatro años en las labores paternales y ya ha recurrido a algunas técnicas de su oficio de cocinero para hacer que su pequeño Nicolás coma con fundamento.
"Me cuesta que coma vegetales y se los proceso todos para que no los vea enteros. Ama el sirop de maple y le pongo un poco en las panquecas. Tratamos de colocarle en la lonchera frutas para que siempre tenga un menú balanceado".
Como a todo niño, a Nicolás le encanta comer dulces, pero el chef León Faría aclara que lo controlan.
"Otra de las cosas que le gustan mucho es el clásico sándwich de queso bien tostado con mantequilla. La alimentación es un proceso educativo a través del cual vas llevando al chamo por una ruta de sabores y texturas para que aprenda a comer de todo", apunta el integrante del Grupo Occidental de Gastronomía y chef de Atte. Café.
@hectorgalbanc
Después de dos hijos ya Tomás Rodríguez es todo un experto haciendo loncheras. "Siempre me ha gustado cocinar, y desde que mis dos hijos eran pequeños, cuando preparaba cosas en casa, les daba pedacitos de verduras y frutas para que se fueran familiarizando. Ya ambos son universitarios y, la verdad, no sufrí mucho con el tema de las loncheras".
El chef de Lola Mora recuerda que les preparaba cereal, leche y frutas. "Como lonchera para la universidad les enviaría un sándwich de roast beef con una ración de fruta". Resalta que en las loncheras de los chamos debe incluirse siempre una ración de fruta fresca para aportar una buena carga de nutrientes.
"Hacer la lonchera para el chamo es un proceso de descubrimiento tanto para los padres como para los hijos. A los primerizos les digo que tengan paciencia y que vayan haciendo pruebas de ensayo y error hasta lograr encontrar la combinación que al niño le guste. Partiendo de ese plato que le gusta, les recomiendo ir haciendo ligeras variaciones para que no se aburran siempre con lo mismo".
Por Josely González
Ya su hija no está en primaria pero aún le hace merienda y ella no se pone brava; por el contrario, le encantan las meriendas que su mamá le hace. "Desde pequeña la he acostumbrado a llevar merienda. Trato de que no coma tantas frituras que venden en las cantinas de los colegios, busco que se alimente sano".
Josely es comunicadora social y luego de varios años de ejercicio decidió estudiar cocina. Poco a poco la gastronomía se convirtió en su primer trabajo al punto de dejar de ejercer como publicista. Solo tiene tres años en las cocinas profesionales pero declara estar completamente enamorada de su oficio tras los fogones.
"Nunca tuve mayores problemas con las meriendas porque mi hija Majo siempre fue de buen comer. Es fanática del pan pita y le hago de merienda los 'sobres majo': uso el pan pita como base y le coloco el relleno en el centro. Luego los envuelvo como sobres y los barnizo con aceite de oliva, agrego un punto de sal y los llevo al horno.
Por lo general se los hago de pizza porque es su otro delirio". Confiesa que nunca le gustó madrugar para hacer loncheras y que estos "sobres", además de gustarles a su hija, puede hacerlos en la noche y en la mañana. Sólo es cosa de meterlos al horno.
Por León Faría
Solo tiene cuatro años en las labores paternales y ya ha recurrido a algunas técnicas de su oficio de cocinero para hacer que su pequeño Nicolás coma con fundamento.
"Me cuesta que coma vegetales y se los proceso todos para que no los vea enteros. Ama el sirop de maple y le pongo un poco en las panquecas. Tratamos de colocarle en la lonchera frutas para que siempre tenga un menú balanceado".
Como a todo niño, a Nicolás le encanta comer dulces, pero el chef León Faría aclara que lo controlan.
"Otra de las cosas que le gustan mucho es el clásico sándwich de queso bien tostado con mantequilla. La alimentación es un proceso educativo a través del cual vas llevando al chamo por una ruta de sabores y texturas para que aprenda a comer de todo", apunta el integrante del Grupo Occidental de Gastronomía y chef de Atte. Café.
@hectorgalbanc
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